¡Hola a todos! Hoy comenzamos con una serie de tutoriales con los que aprenderemos a sacarle el máximo partido a nuestra cámara, tanto si es compacta como si es profesional o semi-profesional. Aprenderemos a utilizar diferentes funciones de la cámara de forma sencilla.
Es decir, ante todo las explicaciones serán simples, detalladas, al alcance de todos y lo mejor es que ni siquiera vamos a necesitar comprar ningún material específico, lo haremos todo de la forma más fácil, eficaz y económica posible. Dicho esto vamos con el primer tutorial: Qué es y cómo utilizar el enfoque.
El enfoque es un mecanismo de la cámara que nos permite enfocar a los elementos que se encuentran a diferentes distancias de ella, o dicho en otras palabras, conseguiremos el clásico efecto en el que un elemento se ve nítido y el resto se ve difuminado, como podemos ver en la foto superior. En ella la flor está enfocada, se ve nítida, y el fondo de hojas queda ligeramente difuminado. Esto se puede conseguir de dos maneras, a través del enfoque automático o del manual. A continuación te explico cómo aplicar esta técnica.
En cámaras compactas:
La mayorían trabajan solamente con autofoco o enfoque automático, de modo que suelen enfocar solo hacia el centro de la fotografía. Si queremos fotografiar algo que no se encuentra en el centro, sino en uno de los lados, probablemente no conseguiremos que aquello que nos interesa se vea nítido. Afortunadamente podemos arreglar esto de una forma muy sencilla, utilizando el bloqueo de enfoque.
Si te fijas en tu cámara verás que puedes pulsar el botón del disparador (el de hacer la fotografía) hasta la mitad, cuando lo pulsas hasta la mitad sonará un suave «bip» y/o se encenderá una lucecita en la pantalla. Esto sirve para enfocar hacia aquello que queremos que aparezca nítido y, mientras mantengamos el botón en la mitad, el enfoque quedará bloqueado. Cuando lo tengamos enfocado donde deseamos, pulsamos el botón hasta el final y listo. Véamoslo en imágenes para entenderlo mejor.
En la siguiente imagen tenemos una figurita, al no haber utilizado el bloqueo la cámara enfocó automáticamente al centro y, la figurita que está a un lado, se ve borrosa.
Para conseguir que esta foto quede bien haremos lo siguiente: Centra la imagen, de modo que la figura quede en el centro. Pulsa el disparador hasta la mitad para enfocarla y mantenlo.
Ya tienes el enfoque bloqueado, ahora cambia de posición hasta que la figura quede donde más te guste, en mi caso la dejo en el lado derecho. Una vez la tengas donde quieres, pulsa el disparador hasta el final y listo. Ya tienes la fotografía tal y como querías.
En cámaras profesionales o semi-profesionales:
Con estas podemos conseguir el enfoque de diferentes modos: Haciendo exactamente lo mismo que hemos explicado anteriormente, configurándolo de forma manual o utilizando directamente el autoenfoque, que en cámaras de este tipo tienen más opciones que en las compactas.
Para configurar el enfoque de forma manual utilizaremos el anillo que se encuentra cerca de la lente, es una especie de ruedecilla que podemos mover girándola a un lado o al otro. Para utilizarla podemos mirar por el objetivo y girar la ruedecilla hasta enfocar lo que deseamos o podemos mirar la pequeña ventanilla que se encuentra justo al lado, ahí aparecerá una escala en metros y podrás seleccionar lo que más te interese, por ejemplo, si vas a fotografiar un objeto que se encuentra a 2 metros, mueves el anillo hasta marcar esa distancia y listo.
Esta opción es altamente recomendable cuando vamos a fotografiar algo que ocurrirá muy rápido, por ejemplo, un esquiador dando un salto. Calculamos más o menos a qué distancia ocurrirá eso, por ejemplo puede ser a 4 metros, lo marcamos en el anillo y ya estamos listos para pillarle en acción. Si utilizáramos el autoenfoque en esta situación probablemente perderíamos la oportunidad de conseguir una buena foto del momento.
Y hasta aquí el tutorial de hoy, ya sabemos cómo utilizar el enfoque, así que ahora ¡A practicar!.
