¿Sabes como medir o configurar la Prioridad de uso del CPU?

prioridad de uso del CPU en Windows
La prioridad de uso del CPU en el ordenador personal es uno de los aspectos más importantes que deberíamos tomar en cuenta, pues de ello dependerá la calidad de trabajo que tengamos en Windows con cada una de las aplicaciones ejecutadas.
Ello quiere decir, que si en un momento determinado estamos trabajando normalmente en cualquier herramienta en Windows, quizá el sistema antivirus (o cualquier otra diferente) empiece a realizar determinados análisis en el sistema operativo. Ello es calificado como una prioridad de uso del CPU considerablemente alta y emergente, lo cual llegará a provocar un consumo excesivo de procesador, la memoria RAM y otros cuantos aspectos adicionales. Si nuestro equipo cuenta con recursos mínimos, entonces estaremos experimentando una lentitud extrema en la aplicación que se estaría ejecutando en ese momento. Ahora te mencionaremos, a dos alternativas que puedes utilizar para cambiar dicha prioridad de uso de CPU.

Mecanismo convencional para manejar la prioridad de uso del CPU en Windows

La primera alternativa que debemos mencionar en este instante, es aquella que viene instalada como función nativa dentro de Windows. Ello quiere decir, que no necesitaremos hacer uso de ningún tipo de herramientas de terceros para poder administrar la prioridad de uso de CPU de nuestro ordenador con Windows. Para ello, solamente tendríamos que ejecutar al Administrador de Tareas, debiendo posteriormente dirigirnos hacia la pestaña de «Procesos».
Adminitrador de Tareas en Windows
Una vez allí tendremos que buscar a aquella herramienta o proceso que está consumiendo un gran porcentaje del trabajo de nuestro CPU. Con sólo seleccionar con el botón derecho a dicho elemento aparecerán unas cuantas funciones en el menú contextual, pudiendo ordenar en ese mismo instante, que la prioridad de uso de CPU sea alta, baja, normal o cualquier otra que nosotros consideremos necesario establecer.
La ventaja de este mecanismo, es que no necesitaremos hacer uso de herramientas de terceros como lo mencionamos anteriormente aunque, nos veremos obligados a tratar de ejecutar manualmente a este sistema para tratar de administrar dicha característica. Es esa la razón por la cual mencionaremos a dos aplicaciones que podríamos manejar con este objetivo, es decir, para que automáticamente la prioridad de uso de CPU, se normalice de acuerdo a lo que nosotros definamos.

1. ProcessTamer

Esta viene a ser la primera alternativa que mencionaremos por el momento, a la cual la podremos utilizar completamente gratis. La parte más fácil de todo se encuentra en la primera pestaña de la interfaz de trabajo, en donde debemos definir, el tipo de prioridad de uso del CPU que deseamos asignar para una herramienta o recurso específico.
processpriority
Debido a que esta aplicación se aloja en la «barra de notificaciones» de Windows, el acceso a la misma es algo muy fácil y rápido de ejecutar.
processpriority-2
Quizá la parte más complicada de todo para un usuario común y corriente se encuentre en la pestaña de configuración de esta misma herramienta; allí tendremos la posibilidad de automatizar esta prioridad de uso del CPU, lo cual quiere decir, que si un momento determinado alguna aplicación, herramienta o proceso llega a superar un porcentaje específico (que nosotros lo definiremos), la herramienta no dejará que se use todo sino más bien, una pequeña porción de todo el potencial de nuestro procesador.

2. Process Lasso

Al igual que la herramienta anterior, con Process Lasso también tendremos la posibilidad de poder administrar eficazmente, la prioridad de uso del CPU en nuestro sistema operativo de Windows.
Process Lasso
Existe una conveniencia bastante grande para quienes sean informáticos especializados, pues dentro de su configuración (que es una de las más complicadas que existen) se puede definir el porcentaje de uso de todo el sistema operativo en sus aplicaciones, con el procesador del equipo. También, se puede llegar a ordenar que se utilice determinado número de núcleos del mismo.
Si no se desea utilizar a esta configuración avanzada, un usuario común y corriente puede utilizar a la predeterminada, la cual le ayudará a que el uso del CPU en Windows sea moderado, lo que quiere decir, que automáticamente todos los procesos tendrán que regirse a lo que el usuario defina en esta herramienta.

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